Westeros es una tierra dividida. Desde los verdes pastos de El Dominio hasta el frío del Norte y los desiertos bañados por el sol de Dorne, las Grandes Casas que controlan las distintas regiones del continente compiten constantemente por el poder, el honor y la gloria.
Tanto los bajeles como los nobles saben que cada Casa está armada de forma única con sus fortalezas y debilidades. Hay quienes despliegan los ejércitos mejor equipados y más entrenados, amenazando a sus vecinos mediante la fuerza militar bruta. Otras tienen formas más sutiles de cultivar el poder: a través del oro, los granos o los dioses. Y algunos simplemente se casan con Casas más fuertes, forjando alianzas para beneficiar a su familia durante generaciones.
Por muy angustioso que parezca, intenta imaginar que vives en el mundo de hielo y fuego de George R.R. Martin. Tal vez seas un plebeyo, uno de los muchos banderizos de las Casas menores. O eres un vagabundo que busca la mejor región para establecerse. Pregúntate. "¿A qué Casa de Juego de Tronos pertenezco?" ¡Haz el test para encontrar la que te corresponde!
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Las Grandes Casas de Westeros están constantemente enfrentadas entre sí. Al fin y al cabo, es el propio conflicto que se produce entre las Casas rivales lo que alimenta el Juego de Tronos. Los reyes mueren, se libran guerras de sucesión, el pueblo se une a nuevos y más atractivos líderes, y todo ello mientras el invierno se acerca constantemente. GOT tiene una intriga geopolítica picante, seguramente un placer para los historiadores y los fanáticos de lo militar.
Al principio de la serie, los Baratheon tenían el poder predominantemente a través de la corona, y sin embargo muchos podrían argumentar que la Casa más fuerte eran los Lannister con sus minas de oro, o los Tyrell, que alimentaban el continente con su abundancia de cultivos.
Para complicar las cosas, existían los comodines de los Stark, ligados al honor, y los caprichosos Greyjoy, cuyo apoyo podía hacer y deshacer reyes. Los Tullies y los Martell dieron un paso más allá y se especializaron en casarse con otras familias más fuertes.
Sin embargo, quizás el elemento más volátil provenía de los Targaryen exiliados. Abandonados a su suerte en el continente de Essos, poseen sin embargo los secretos para domar y controlar a los dragones, y gozan de un prestigio incalculable como herederos del imperio perdido de la Antigua Valyria.
Los Lannister reclaman el dominio de las Tierras de Westerlands, una región de Westeros bendecida con belleza ambiental y recursos naturales. Estas tierras también esconden una abundancia de mineral de oro, que la Casa Casterly ha explotado durante generaciones para convertirse en los nobles más ricos del continente.
Estas abundantes minas de oro, junto con el resto de las Westerlands, pasaron a estar bajo el control de los Lannister durante la época de Lann el Listo, fundador de la línea de sangre de la familia. Este oro es el principal motivo por el que los Lannister son tan ricos.
El comercio y la industria también contribuyeron a las arcas de la familia, ya que la región ofrecía muchos lugares estratégicos para el transporte marítimo y los negocios, incluida la ciudad de Lannisport.
La "locura de los Targaryen" es una aflicción que han padecido muchos miembros de la familia a lo largo de los siglos, como Aerys II, el Rey Loco, e incluso la pobre Dany en la serie de televisión. Incluso ha inspirado su propia frase: "cada vez que nace un Targaryen, los dioses lanzan una moneda".
Esta locura es el resultado de las generaciones de endogamia para mantener pura su línea de sangre real. No todos los afectados están locos de nacimiento; algunos enloquecen con el tiempo, escuchando voces, obsesionándose con la destrucción y desarrollando una personalidad sedienta de sangre.
